Despedida al CRE de Sevilla

Querido Centro de Recursos Educativos “Luis Braille” Queda poco, muy poco, quizás nada para que termine este curso y nos vayamos de vacaciones de verano, para poder disfrutar de todo lo que nos gusta hacer y que no podemos realizar durante el curso. Todo esto estaría muy bien si luego volviésemos en septiembre de nuevo al CRE, como me ha sucedido durante cinco maravillosos años. Pero no, este año ya no hay vuelta atrás, muchos de nosotros (casi todos) debemos de enfrentarnos de nuevo a un mundo en el que no todos somos iguales, en el que la mayoría de las personas no son como nosotros. Sin duda me estoy refiriendo al mundo de Integrada, al mundo “de los normales”, y lo pongo con comillas porque nosotros también lo somos, sólo que tenemos una discapacidad, unos más grave, otros menos grave y otros varias discapacidades. A continuación, os iré dando las gracias, por grupos, a cada uno de los profesionales que habéis formado parte del CRE. A los profesores de este CRE, me gustaría agradeceros lo que día a día hacéis por todos nosotros, por todo vuestro empeño para que cada día podamos ser mejores personas, unas personas de provecho… además de que seamos cultos y sepamos sobre las distintas asignaturas. Es verdad que hay asignaturas que me han gustado más y asignaturas que me han gustado menos, profesores a los que he comprendido mejor y profesores a los que he comprendido menos… pero, ¿acaso no pasa esto en todas las fases que constituyen la vida de un ser humano? Sé que a muchos de vosotros, quizás a todos, os he sacado alguna vez de vuestras casillas y ha habido un momento en el que no nos hemos comprendido, pero ya sabéis que vuestro Joaquín es así, un chico cabezón, rebelde y protestón, pero que ya sabéis que en realidad, os quiere un montón. Aún recuerdo cuando entré aquí el primer año, y veo a una persona completamente distinta a la que entró en este Centro. Una persona más fuerte, más madura, menos tonta y a la vez menos simpático, una persona que ya no soporta todo lo que la vida le da, sino que lucha por lo que quiere, porque lo importante en esta vida es ser un luchador. A los educadores de este CRE, por hacer que cada día seamos más autónomos como personas, para que cada día podamos ser mucho más autónomos y no necesitemos la ayuda de papá y de mamá para todo. Las gracias también por realizar con todos nosotros tantas y tantas actividades (cocina, habilidades sociales…) ¡Ay, qué buenas cenitas nos hemos pegado en el apartamento! ¡Qué buenas pizzas me he comido con todos vosotros! Aquí también recuerdo el primer año que entré, y veo a una persona un poquito más autónoma, más competente, más sociable... es verdad que el tema del orden no se ha terminado de conseguir, pero debéis de comprender que esto es algo difícil. Al despacho de Residencia, Ricardo, Domingo (anteriormente Rosa) y Pauli, por todo el esfuerzo que hacéis y sé que seguiréis haciendo para que este Centro de Recursos Educativos tenga un buen fin a la hora de la autonomía personal. Por vuestras risas, por vuestra ayuda, por vuestros consejos… con algunos de vosotros habré hablado más y con otros menos, pero os puedo asegurar que a todos os tengo el mismo aprecio en proporción. Puede que sea un aprecio distinto el que os tenga a cada uno de vosotros, pero podéis tener claro que a todos os quiero por igual. A mis compañeros, bueno, os ha tocado el turno. De vosotros la verdad que podría escribir perfectamente un buen libro gordo, sí, de esos de 10 volúmenes en Braille… Recuerdo que, al principio de mi llegada, a todos nos costó mucho asumir que había un compañero nuevo en clase. Un “doraemon” como me llamabais al principio, ¿verdad Eva, Demelza…? Aunque yo soy una persona que me suelo adaptar bastante bien a todo, con algunos vosotros la verdad que al principio no me llevé muy bien, pero conforme fue pasando el tiempo y nos hemos ido haciendo más y más mayores, nos hemos ido comprendiendo mejor, nos hemos reído juntos, lo hemos pasado a veces bien, a veces mal… nos hemos soportado y peleado, llorado y reído… pero hemos formado una especie de “familia”, con sus peleas, a veces más grandes y a veces más chicas. La verdad que este curso que finaliza es, quizás, el curso que mejor me he podido sentir con todos vosotros, ya que os habéis portado muy bien conmigo y me habéis ayudado, aunque también es verdad que hemos tenido nuestras peleas, pero bueno… no me puedo llevar bien con todo el mundo; me es imposible. Espero que durante muchos años más sigáis trabajando duro para que esta fundación siga siendo lo que siempre ha sido, una muestra de compañerismo, igualdad, solidaridad y buen rollo entre todos los componentes. A la dirección de este CRE, Loli Carmen, Carmen de Miguel y Amparo (anteriormente Manuel Cruzado), que, aunque algunas veces hayan hecho y decidido cosas que a los alumnos no nos han gustado y que no hemos estado totalmente desacuerdo, pero que sé que todo lo que habéis hecho lo habéis hecho con la mejor intención, para que los alumnos y profesionales que componemos este CRE estemos a gusto y seamos cada día mejores personas, más independientes, más autónomos, más comprensivos, más felices… Sé que en muchas ocasiones os habréis sentido un poco mal por algunas cosas que hayan pasado en el Centro de Recursos Educativos, pero sabéis que si no fuese por vosotros este CRE no podría ser posible. A los demás profesionales del CRE, formado por TRS, Servicio de Cocina, Servicio Médico, Centro de Producción, Equipo de Integrada, Psicólogos, Pedagogos…: A algunos de vosotros os habré tratado más y a otros menos, pero gracias a todos vosotros este CRE sigue adelante. ¡Ay, qué buenas hamburguesas me he comido gracias al servicio de Cocina, qué buenos libros he leído gracias al Centro de producción, qué bien me manejo gracias a los TRS, qué buenas charlas me he pegado con los Psicólogos, qué bien he aprendido a tomar mis decisiones sobre mi futuro gracias al Pedagogo, qué alegría tener un equipo de Integrada para saber que siempre estará aquí con todos nosotros y que nos ayudará en lo que necesitemos!... Ahora, como digo, me enfrento a un mundo cruel y desigual, donde no todos somos iguales, y donde sin duda me encontraré con muchísimas barreras que se interpondrán en mi camino, y yo me caeré, y me levantaré, y me volveré a caer… porque esa es la realidad, y de los errores también se aprende. Ha llegado la hora de que yo me marche, pero no penséis que, al marcharnos nosotros, ya se termina vuestro trabajo. Ahora vendrá otra generación, otras personas a las que tendréis que atender con el mismo cariño y amor que lo habéis hecho con todos los que nos marchamos este curso. Y, sobretodo, tened presente que siempre, siempre tendréis que seguir trabajando tal y como lo habéis hecho hasta ahora. Bueno, mi querido CRE, me voy a tener que ir despidiendo de todos vosotros. Espero que este Centro de Recursos Educativos siempre siga ahí, y que día a día vayamos mejorando en todas las barreras que se nos presenten en nuestro camino, porque ni nada ni nadie es perfecto, siempre hay algunas cosas que se deberían de mejorar, y sé que si hay algo que no le falta a este CRE es afán de superación. Al poner “vayamos” no me he equivocado, pues aunque me vaya a Córdoba y pertenezca al Equipo de Integrada, vosotros siempre seguiréis siendo “Mi cole de S3evilla”. Un abrazo, saludos y gracias por todo: Joaquín Caballero Moral Alumno CRE “Luis Braille”. Sevilla, 22 de marzo de 2012